la espiral que baja por el centro

ESTRATEGIA DE ESTAR PRESENTES 1

los sonidos del río suben y bajan por el cuerpo

ENTRE DOS AGUAS investiga el sonido del agua que corre a ambas márgenes del océano (Berlín/San Juan- México/Munich) y encuentra el sonido del río corriendo por debajo de todo y por encima de todo.  La instrucción hace al oyente notar el sonido del agua e interesarse en responder con una acción sonora, proyectar los sonidos del agua en su propio cuerpo -y en el de los otros- como canales o tubos por donde suban los cursos subterráneos y bajen las trayectorias aéreas de las nubes.  

Para Gaston Bachelard el imaginario material del agua refiere a la catástrofe. Älois Riegl habla de la catástrofe cultural para explicar cómo una cultura vencedora arrasa con el capital simbólico y artístico de la cultura vencida. Wollen; puedo, pero no quiero. La composición palindrómica superpone la catástrofe cultural a la catástrofe natural y crea un monstruo ante el cuál los habitantes desastrados -extrañados- improvisan sus defensas de cardumen; mientras, en otra parte del planeta, el agua no se encuentra y los incendios arrasan con los bosques secos. (…) Por definición, todo monstruo es excesivo. El monstruo suele poseer una morfología barroca que se contrapone a una arquitectura funcional deslumbrante, al mismo tiempo animal y maquinal (…) Arrancado de su ambiente originario, el monstruo, en cada nuevo contexto, formará otro monstruo, más terrible, más ilegible (…) (Wainhaus, H. 2007) Pg. 482. 

Al otro lado del curso habitual de los rebaños, el individuo -extrañado- antepone a la catástrofe una estrategia formal, cada cuerpo actúa sobre los otros según un intercambio organizacional-informacional de manada, cardumen, bandada: 

 “(…) una anguila que es una estrella que es una anguila (…)”

Cortázar, Prosa del Observatorio 

Frente a la catástrofe, la manada se interna en una travesía al Desierto en busca de agua y alimento. El cuerpo de cada animal diluye su poder en la extensión de un cuerpo multiplicado que resiste la inmensidad espacial del Desierto oponiendo una voluntad ampliada, capaz de alejarle con los remolinos y atravesar el caos y la catástrofe.

Sin embargo, una mónada de la manada se desvía. Un gesto de autoorganización, un acontecimiento ante la movilidad que imprime en él el Universo, acaba provocándole un extrañamiento y un Desvío. Ávido de novedad, el extraviado se desvía por caminos de una lógica irregular e inconsistente; asume un Punto de Vista suficientemente alejado -extraviado- continuando el impulso del giro espacial del desvío. El extraviado se aleja a habitar en soledad. 

Wollen, puedo, pero no quiero. Componer la materialidad sonora según la trayectoria del vórtice, significaría enfrentar la catástrofe con un cuerpo múltiple de cardumen y en un segundo gesto solitario, afirmar la voluntad del enfrentar con el saltar dentro, al elevarse en la cúpula oscura y sumergirse en la profundidad del estanque de un segundo piso simultáneamente aéreo y submarino, palindrómico y paradojal, puro sonido en un horizonte de silencio, alejado de las fuerzas vitales, cósmico, plano y eterno, solo con la tecnología de la escucha y la amistad.

Escuchemos...